Historia de la Guardia Civil
Historia Guardia Civil
COMPAÑIA DE FUSILEROS GUARDABOSQUES REALES
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- Categoría padre: Historia Guardia Civil
- Categoría: Antecedentes a la Guardia Civil
- Publicado el Jueves, 27 Octubre 2016 19:50
- Escrito por Antonio Mancera
Por Real Decreto de 4 de agosto de 1761 y para dedicarlos, principalmente, a la custodia de los bosques reales de El Pardo y Casa de Campo, se organizó una compañía suelta -o exenta- con cuartel en Aravaca. Estaba compuesta por un capitán, un teniente, dos subtenientes, cuatro sargentos, doce cabos, tambor, pífano y ochenta y dos fusileros. El 29 de enero de 1784, al publicarse su reglamento, la plantilla se incrementó con capellán, cirujano, maestro armero y veinte fusileros. Su uniforme, azul turquí con divisa encarnada, era similar al del Ejército, a diferencia de usar gambeto y redecilla. Por armamento tuvieron fusil y escopeta, pistola y bayoneta de dos filos. La oficialidad vestía casaca y chupa con sus correspondientes divisas. Recibía reales despachos y gozaba de iguales sueldos que los de Infantería, aparte de algunas gratificaciones específicas consistentes en ciento veinte reales mensuales, el capitán; ochenta, el teniente, y sesenta, el subteniente; el sargento, ciento cuarenta y nueve; el cabo, ciento doce, y el fusilero, noventa y siete, sin ración de pan. Gozaban de fuero militar y tenían derecho a hospitalidades, quedando exentos de pagar cuotas de montepío e inválidos. En asuntos de justicia quedaban sujetos a la ordenanza militar; el capitán jefe podía instruir los procesos aunque, antes de sancionar, tenía que dar cuenta reservada al Ministerio de la Guerra.
MILICIAS URBANAS DE ANDALUCIA
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- Categoría padre: Historia Guardia Civil
- Categoría: Antecedentes a la Guardia Civil
- Publicado el Jueves, 27 Octubre 2016 19:48
- Escrito por Antonio Mancera
Con naturaleza mitad militar, mitad civil, a finales del siglo XVII surgieron las Milicias Urbanas, completando así las actuaciones de las Guardas de la Costa.
Contaron en su historial con importantes servicios, y participaron tanto en el primer asedio a Gibraltar como en las defensas de Ceuta y Melilla, donde consiguieron "un escudo de ventaja sobre las demás tropas", gracias a la eficaz actuación de sus mosqueteros.
Como consecuencia de la revista general que realizó a todas sus dependencias el mariscal de campo y enviado real, Bucarelli, un real decreto de 11 de agosto de 1776, los integro en el Ejército real, pues "el Rey, teniendo en cuenta el continuo servicio que ejecutan las compañías de Milicias del Partido de las Alpujarras y de toda la Costa de Granada asistiendo a sus socorros en los continuos rebatos que ocasionan los insultos de los moros, que penetrarían la tierra adentro si faltase esta oposición y defensa y teniendo en cuenta que en ocasiones se empeñan en auténticas acciones de guerra, se les considera dentro del fuero milita".
LAS COMPAÑÍAS DE INVÁLIDOS DE MADRID
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- Categoría padre: Historia Guardia Civil
- Categoría: Antecedentes a la Guardia Civil
- Publicado el Jueves, 27 Octubre 2016 19:44
- Escrito por Antonio Mancera
Las muchas guerras que España había mantenido durante el reinado de Carlos II, propiciaron la existencia de numerosos mutilados y disminuidos físicos como consecuencia de las heridas recibidas en combate. Su dificultad de encontrar trabajo indujo a Felipe V, con sentido proteccionista, a organizarlos en el Cuerpo de Inválidos, darles el carácter de instituto armado y encargarlos de determinados servicios de orden público, tales como el control de vagabundos, mendigos y holgazanes, inspección de establecimientos públicos, ocio y hospedaje, control de entrada y salida de viajeros en las puertas de Madrid, y otras ocupaciones de acuerdo con sus limitadas posibilidades humanas. No deja de ser pintoresca la determinación real, ni cuando menos expresivo lo que a simple vista presentaría aquel “órgano policial”, si así podemos llamarlo, de cojos, mancos, tuertos a impedidos.
Para colaborar en sus intervenciones, el primero de mayo de 1761, se ordenó la creación de una Milicia Urbana por el sistema similar de las Provinciales, primero para Madrid, con posibilidad de ampliarla al resto de las capitales. Se admitió en la misma a vecinos voluntarios del sector burgués, artesanos y comerciantes que se comprometieran a ayudar desinteresadamente a los Inválidos, absorbiendo en la práctica al incipiente cuerpo de cuarenta alguaciles que, bajo la dependencia de un alguacil mayor o jefe de policía, se distinguieron por ostentar “una vara de madera y no de junco, capaz de imponer el orden”.
BALLESTEROS DEL CENTENAR
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- Categoría padre: Historia Guardia Civil
- Categoría: Antecedentes a la Guardia Civil
- Publicado el Jueves, 27 Octubre 2016 19:40
- Escrito por Antonio Mancera
Siendo de necesidad imperiosa la persecución de malhechores, los ballesteros de la Señera Real fueron reorganizados para dicho fin, siendo armados, en principio, a partes iguales, con arcabuces y ballestas, sin olvidar que su privilegio más destacado continuó siendo la custodia de la Señera Real, tanto en las grandes solemnidades como en campaña. Tuvieron por patrón a San Jorge, común a todo el reino de Aragón, incluida Cataluña, Baleares y, por supuesto, Levante, circunstancia por la que también se les denominó “Centenar dels Glorios Sant Jordi” y, vulgarmente, “Centenar de la Ploma”, debido al sello -de plomo- con que estaba otorgado el privilegio de su creación.
Ballesteros y arcabuceros se reclutaron en las germanías o gremios de la ciudad. El término germanía, derivado de germanitas, germanitatis, no es otra cosa que relación o parentesco entre hermanos, cuyo origen es similar al de Hermandad.
GUARDAS DE LA COSTA DEL REINO DE GRANADA
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- Categoría padre: Historia Guardia Civil
- Categoría: Antecedentes a la Guardia Civil
- Publicado el Jueves, 27 Octubre 2016 19:35
- Escrito por Antonio Mancera
Tras una época de crisis a mediados del siglo XVII, los rudimentarios grupos de atajadores recibieron un gran impulso, constituyéndose como instituto armado, que llegó a alcanzar efectivos de trescientos treinta y seis hombres entre arcabuceros y ballesteros, más doscientas treinta lanzas. Tanto su organización como sus misiones fueron revisadas. Se habilitaron para alojamiento locales donde anteriormente se habían aposentado con la denominación de Guardias Viejas, para diferenciarlas de las reorganizadas o nuevas. Subsistieron hasta 1848, aunque, desde mucho antes su existencia era más bien simbólica. El personal que la constituía quedó absorbido en las Milicias Urbanas Andaluzas y, posteriormente, fueron destinados como torreros. Su último destino fue el de “mantener vela”, vigía o centinela permanente en los parajes dominantes de la costa granadina, malagueña y almeriense.
MIGUELETES Y FUSILEROS DEL REINO DE VALENCIA
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- Categoría padre: Historia Guardia Civil
- Categoría: Antecedentes a la Guardia Civil
- Publicado el Jueves, 27 Octubre 2016 19:29
- Escrito por Antonio Mancera
Su denominación fue muy discutida, debido al origen un tanto enrevesado del término. Para aclarar conceptos muy convenientes, diremos que la voz "miquelet", miguelete, diminutivo vernáculo de Miguel (o Miquel), no quiere decir, como muchos han creído, que sea derivado de Miguel del Prats, célebre bandido y guerrillero, amigo personal del duque de Valentinois, que luchó denodadamente contra los franceses en 1647.
Tan atractiva denominación atiende preferentemente al tipo de arma empleada, cuya llave de chispa, simplificación de la de rueda, apareció a mediados del siglo XVI, dándole dicho nombre para diferenciarla de otras similares que han pasado a la historia del armamento con las denominaciones de "francesa" y "holandesa", arrogándose indebidamente una originalidad que no les corresponde. Francia y Holanda, en unión de Inglaterra, antes que llamarla "llave española", aceptaron el término de "miguelete". De ahí que las armas largas dotadas con dicho mecanismo recibiesen también esta denominación y, por extensión, sus usuarios, a semejanza de lo que ocurría con los que emplean carabinas, fusiles, escopetas y granadas, aunque en este caso, por resultar lo correcto -migueletero- tal vez excesivamente largo, hubo de influir el metaplasma del apócope.